Cuatro años después de las avalanchas de inmigrantes de 2005, Melilla está viviendo un periodo de cierta tranquilidad en lo que a presión migratoria se refiere, aunque eso no ha llevado a bajar la guardia, ya que, con sus altibajos, la inmigración es un fenómeno que no cesa.
Si quieres firmar tus comentarios, regístrate o inicia sesión »
En este espacio aparecerán los comentarios a los que hagas referencia. Por ejemplo, si escribes "comentario nº 3" en la caja de la izquierda, podrás ver el contenido de ese comentario aquí. Así te aseguras de que tu referencia es la correcta. No se permite código HTML en los comentarios.
Lo sentimos, no puedes comentar esta noticia si no eres un usuario registrado y has iniciado sesión.
Si quieres, puedes registrarte o, si ya lo estás, iniciar sesión ahora.