River y Boca afrontan bajo presión la quinta jornada del torneo Apertura

Buenos Aires.-  River Plate y Boca Juniors, alejados del liderato del torneo Apertura del fútbol argentino por nueve y ocho puntos, respectivamente, afrontarán bajo presión este domingo sus partidos de la quinta jornada.

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(EFE)

De la mano de esas urgencias aumenta el riesgo que corren los conjuntos más populares del país de quedar fuera de la Copa Libertadores 2010 como consecuencia de la escasa cantidad de puntos acumulados en los últimos tiempos. EFE/Archivo

Ambos equipos fueron eliminados esta semana en la primera ronda de la Copa Sudamericana y sólo les queda en la agenda del semestre la competición local, de 19 capítulos, en la que pueden perder tempranamente toda posibilidad de luchar por el título.

De la mano de esas urgencias aumenta el riesgo que corren los conjuntos más populares del país de quedar fuera de la Copa Libertadores 2010 como consecuencia de la escasa cantidad de puntos acumulados en los últimos tiempos.

Los riverplatenses visitarán al Arsenal bonarense, con el que comparten una modesta posición en la clasificación con cuatro puntos de doce posibles, mientras que el Boca Juniors recibirá en 'La Bombonera' al Godoy Cruz de Mendoza, con el que está igualado en cinco.

"No renuncio. Tengo contrato hasta diciembre y lo voy a cumplir", afirma toda vez que puede el entrenador del River, Néstor Gorosito, quien tras eliminación en la Sudamericana frente al Lanús dispuso separar del equipo por bajo rendimiento al punta Cristian Fabbiani, de lo cual el futbolista se enteró por los periódicos.

Ningún dirigente del club ha manifestado públicamente su apoyo al técnico y son insistentes los rumores según los cuales su relación con los jugadores se ha deteriorado.

La prensa deportiva coincide hoy en preguntarse hasta cuándo se resistirá Gorosito, que pidió refuerzos antes de que comenzara la temporada y no los logró, a dejar su puesto en el caso de que el equipo no levante cabeza.

En el Boca Juniors no hay enfrentamientos entre el entrenador, Alfio Basile, y los jugadores, pero el equipo juega tan mal como el River, sus principales figuras están apagadas y sus delanteros cada vez más alejados de las porterías rivales.

"Me quedé con una gran amargura, ésa fue mi sensación tras la derrota ante Vélez Sarsfield (en la Sudamericana). El objetivo era ganar todo y ahora lo único que nos queda es el campeonato local y hay que remar y remar", dijo Basile.

"Boca tiene que rendir más. Y a partir del domingo tenemos que ganar varios partidos consecutivos y creo que recién a partir de la jornada 13 o 14 vamos a ver si se puede ganar el torneo o no", agregó.

Según Basile "todo se complicó" con las lesiones sufridas en las últimas semanas por varios jugadores y antes de ello con el traspaso del punta Rodrigo Palacio al Génova italiano, que ha sido sustituido por futbolistas de la cantera.

"Godoy Cruz ya anduvo bien el año pasado y este año no arrancó bien, pero va a ser un rival muy difícil. En el fútbol argentino nada es fácil, todo es difícil. Te estudia todo el mundo, nadie te da ventajas, y nosotros ahora tenemos que empezar a ganar", concluyó.