El PP balear augura una nueva crisis del Govern por la posible reducción de consellerias

Palma.-  El PP balear augura una nueva crisis de gobierno en el ejecutivo balear ante la posibilidad abierta por el presidente, Francesc Antich, de reducir consellerías por la crisis pues, a juicio de los populares, sus socios no admitirán que rebaje sus cotas de poder aunque tengan que ir contra el interés ciudadano.

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(EFE)

El presidente del Gobierno balear, Francesc Antich. EFE/Archivo

El portavoz del PP balear, Carlos Simarro, ha hecho esta valoración ante el anuncio del Govern de que estudiará fusionar o eliminar departamentos en la rueda de prensa semanal que ofrece el partido para analizar la actualidad política en las islas.

"Ahora el presidente Antich dice que va a estudiar esa posibilidad (de reducir consellerías, altos cargos y organismos públicos) y los partidos de su Govern le responden: lo harás tú en tus consellerias, a las nuestras ni las toques", ha criticado el portavoz popular.

Esta actitud, a juicio de Simarro, pone de manifiesto que la comunidad está "a las puertas de otra crisis de Govern" y que "el estatus de cada uno de los partidos, el pacto en definitiva, está por encima de los intereses de los ciudadanos".

El popular ha exigido al Govern que se ponga a "trabajar en serio" por Baleares "ante una emergencia económica que se vive en las islas", en las que, ha recordado, casi 70.000 personas estaban en paro este pasado agosto -el mes más fuerte de la temporada turística-, uno de "los peores augurios" para este otoño.

Contrariamente a lo que ayer señalaba la consellera de Trabajo, Joana Barceló, que se mostraba optimista porque la reducción de la afiliación había sido menor que en otros meses, los populares han advertido de que "lo peor está por llegar".

El problema reside, en opinión del PP, en que el Govern pretende afrontar esta situación con una "política de subsidios" sin aportar ninguna ayuda al sistema productivo. En este sentido, Carlos Simarro ha puesto como ejemplo la "pasividad" del ejecutivo ante la marcha de Travelplan (Globalia) a Canarias, "al igual que hizo Spanair".

"La prioridad (para el Govern) es la tajada de los presupuestos que corresponde a cada uno de los partidos que conforman el ejecutivo", ha lamentado el portavoz del PP balear, quien se ha preguntado también dónde quedó el dinero que iba a conseguir la comunidad con las negociaciones de la nueva financiación autonómica.

El PP "ante todo esto" ha asegurado que "debe y sabrá estar a la altura" y se ha ofrecido a negociar con el Govern los presupuestos del año que viene para que sean útiles para el ciudadano, aunque ha manifestado que duda de si el ejecutivo será capaz de ir más allá de la foto y el titular periodístico.

En este sentido, Carlos Simarro ha pedido al Govern que deje de aludir a la herencia dejada en las arcas autonómicas por el PP, porque, en su opinión, no es más que una "excusa de mal perdedor" que el gobierno de Francesc Antich lleva dando a lo largo de estos dos años de legislatura "para no hacer nada, ningún proyecto".

"El Govern lo que ha de hacer es gobernar, es trabajar y poner una línea de actuación de los seis partidos que lo integran, porque cada año hay un presupuesto, que ha de organizarse (...) no sólo cargar las tintas contra los anteriores gobernantes", ha remarcado Simarro.

El portavoz del PP ha advertido al ejecutivo de Antich que "no se crea que tirando piedras contra el PP y escondiendo la mano solucionará el futuro".

Asimismo, ha señalado que con actitudes como la mostrada por la alcaldesa de Palma, Aina Calvo, al reformar dos despachos en los que ha invertido más de 50.000 euros "en plena crisis", según ha subrayado Simarro, no se puede gobernar. "Es indignante", ha recalcado.