La bolsa de Sao Paulo pierde el buen humor bajo la influencia de Wall Street

Sao Paulo.-  La bolsa de Sao Paulo perdió hoy el buen humor que amenizó las cuatro primeras jornadas de la semana y cerró con un descenso del 0,93% en su índice Ibovespa, que se ubicó en los 40.076 puntos, por la influencia negativa de Wall Street.

La jornada de este viernes estuvo marcada por nuevos reveses para las acciones financieras, bajo la influencia del presidente de la Reserva Federal, Ben Bernanke, que abogó por intensificar la vigilancia sobre estas instituciones y con especial énfasis en los incentivos que reciben sus ejecutivos.

Con el faro de Nueva York medio apagado, la mayor plaza de América Latina volvió a las penumbras y retrocedió 377 unidades respecto al jueves, que sin embargo, le permitió mantener el umbral psicológico de los 40.000 puntos.

En el corro brasileño, al igual que en el de su primer socio comercial, los bancos fueron las anclas que amarraron los negocios e impidieron que el Ibovespa zarpara hacia una nueva jornada de dividendos.

La mayor bajada del día correspondió a las acciones ordinarias de la propia bolsa (BM&F), que perdieron el 1,91%, pero fueron seguidas muy de cerca por dos de los principales bancos del país, Bradesco e Itaú, justo en un día en el que un estudio reveló que son de los más lucrativos del continente.

Los títulos preferenciales del holding Itausa, que controla al Itaú, se contrajeron el 1,89% y los del Bradesco, el 1,82%.

Con los bancos sumidos en la inseguridad, la orden que guió a los inversores fue la cautela, que se plasmó en el cierre en rojo de 48 de las 66 acciones que componen el Ibovespa y en un volumen de negocios muy inferior al promedio, de tan solo 3.266 millones de reales (unos 1.442 millones de dólares), en 192.608 operaciones.

Entre las acciones más negociadas, las preferenciales de la petrolera estatal Petrobras bajaron el 0,51% y las similares de la minera Vale, segundas de la lista, cerraron con un retroceso del 0,73%.

La subida más acentuada correspondió a las preferenciales de la siderúrgica Usiminas, con ganancias del 3,04%.

En el mercado cambiario, el real cerró con una depreciación del 0,66% frente al dólar, divisa que en el tipo de cambio comercial terminó la sesión negociada a 2,262 reales para la compra y 2,264 reales para la venta.