La presidenta argentina viaja a Cuba para revitalizar las relaciones bilaterales

Buenos Aires.-  La presidenta argentina, Cristina Fernández, viajará mañana rumbo a Cuba, en la primera visita oficial que cumple en 23 años un mandatario de este país a la isla, con la que busca revitalizar las relaciones bilaterales.

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(EFE)

El presidente de Cuba, Raúl Castro (i), posa junto a su homóloga de Argentina, Cristina Fernández, durante la Cumbre de América Latina y el Caribe (CALC), en Brasil. EFE/Archivo

La visita de Fernández responde a una invitación de su colega de Cuba, Raúl Castro, con ocasión de la cumbre de América Latina y el Caribe de diciembre pasado en Brasil, y está marcada por la petición de la médica cubana Hilda Molina para que la mandataria interceda para que se le permita viajar a Argentina a conocer a sus nietos.

El caso de Molina, que ha sido motivo de entredicho diplomático, está fuera de la agenda de Fernández en Cuba, al igual que peticiones de entrevistas efectuadas por grupos disidentes cubanos, ratificaron hoy a Efe fuentes del Gobierno de Buenos Aires.

Las fuentes dijeron que Fernández apunta a reactivar con el país caribeño la cooperación en ciencia, tecnología, turismo, entre otros campos, además de intentar revertir la fuerte caída del comercio bilateral mediante una importante misión empresarial.

La comitiva de Fernández estará integrada por su canciller, Jorge Taiana, y los ministros de Ciencia y Tecnología, Lino Barañao; de Trabajo, Carlos Tomada; de Salud, Graciela Ocaña; y de Planificación, Julio De Vido, entre otros.

Las actividades oficiales de la mandataria argentina comenzarán el lunes con una cita con Raúl Castro, a la que seguirá una visita a un polo tecnológico, en tanto que el martes irá a la Universidad de La Habana y a la Asamblea Nacional.

De momento no se ha confirmado si Cristina Fernández se entrevistará con Fidel Castro, apuntaron las fuentes.

Como parte de esta visita, se firmarán acuerdos para la creación de un centro argentino-cubano de biotecnología para fármacos y vacunas, de promoción comercial y de transporte, de transferencia tecnológica para mejorar la producción agrícola, y de cooperación en el área laboral.

Junto a Fernández también viajarán en misión comercial representantes de unas 70 empresas argentinas que buscan acrecentar sus negocios con la isla en sectores como alimentos, materiales para la construcción, maquinaria agrícola, biotecnología y software, entre otros.

En los primeros nueve meses de 2008, Argentina exportó a Cuba productos por un monto de 61,4 millones de dólares, con una caída interanual del 23%, mientras que las compras a la isla totalizaron apenas 1,8 millones de dólares, un 12% menos que en igual lapso de 2007, según cifras oficiales.

Los portavoces consultados insistieron en que en la agenda oficial de Fernández "no figuran" las audiencias solicitadas por disidentes, tales como el grupo Agenda para la Transición o Molina.

Esta semana, la médica Hilda Molina reiteró su pedido para que Fernández medie para que el Gobierno de Castro le permita viajar a Argentina a visitar a su hijo, el médico Roberto Quiñones, a quien no ve desde hace quince años, y sus nietos, a quienes no conoce.

Las relaciones entre Argentina y Cuba pasaron por un mal momento a mediados de 2006, cuando el entonces presidente Néstor Kirchner, quien es esposo de Fernández, abogó porque La Habana autorizara a Molina a viajar a Buenos Aires.

En 2007, Kirchner desistió de visitar Cuba y a mediados del año pasado las autoridades de la isla permitieron que se radicara en Buenos Aires la madre de la médica cubana, Hilda Morejón, que cumplirá 90 años el próximo lunes.

El otro asunto espinoso en las relaciones bilaterales es la deuda por unos 1.300 millones de dólares que Cuba mantiene con Argentina por créditos concedidos a comienzos de la década de 1970.