Perera vuelve a caer herido, resistiéndose a entrar en la enfermería

Madrid.-  El diestro Miguel Ángel Perera ha vuelto a resultar herido, por segunda vez esta tarde, al inicio de la faena de muleta al quinto toro de la tarde, en la corrida que se está celebrando en Las Ventas, donde actúa como único espada.

Perera se resistió a entrar en la enfermería, mientras sangraba abundantemente a la altura del tercio medio superior de la cara interna del muslo derecho, contenida la hemorragia con un torniquete aplicado en el mismo ruedo con el corbatín de uno de sus banderilleros.

Contra las recomendaciones de las asistencias, incluso desoyendo los consejos que desde el burladero le daba su apoderado, el también matador de toros Fernando Cepeda, el diestro herido permaneció en el ruedo, cojeando visiblemente, y toreando, en una lección de arrojo, pundonor, temeridad y torería, que se siguió desde el tendido con tremenda emoción. Por fin dio muerte al toro, y le fue concedida una oreja, que recogió antes de pasar por su pie a la enfermería.

También en los toros tercero y cuarto había cortado sendas orejas. Tres trofeos en total en los cinco astados que estoqueó.

Con anterioridad a este percance, Perera ya había resultado herido al entrar a matar a su segundo toro, pasando a la enfermería donde se le diagnosticó "evisceración de testículo con salida por raíz de pene", quedando suspendida la corrida por espacio de quince minutos hasta que volvió de nuevo al ruedo tras ser debidamente suturado.

El doctor Máximo García Padrós explicó entonces a EFE que "el torero no ha querido que se le aplicase ningún tipo de anestesia, ni siquiera calmantes para el dolor, para sentirse bien despierto frente a los cuatro toros que todavía piensa lidiar".