El sol brilla en Pekín pero la lluvia amenaza la ceremonia de inauguración

Pekín.-  El sol que luce el cielo en Pekín este fin de semana ha sacado a los pequineses de casa y, de paso, ha arrancado un suspiro de alivio a los organizadores de los JJOO, momentáneo sin embargo porque los hombres del tiempo acaban de alertar de la posibilidad de lluvias el día de la inauguración.

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(EFE)

Un grupo de artistas repasa ayer sus coreografías en el exterior del Estadio Nacional, conocido como "El Nido", durante un ensayo general para la ceremonia de inauguración de los Juegos Olímpicos de Pekín.

Tras interminables días sumida bajo una espesa capa de contaminación y niebla, Pekín ha visto por fin el cielo azul, e incluso alguna estrella por la noche, durante todo el fin de semana, y a cinco días para el inicio de los Juegos de Pekín, la calidad del aire es "excelente", según el Buró de Protección Medioambiental.

Eso sí, siempre de acuerdo con los parámetros chinos, mucho menos ambiciosos que los de la Organización Mundial de la Salud (OMS).

En lo que va de año, la ciudad ha registrado 151 "días azules", es decir, días con una calidad del aire de bastante buena para arriba, dijo el subdirector del Buró, Du Shaozhong, citado hoy por hoy el diario oficial "China Daily".

Es el mismo Du que tuvo comparecer ante los medios la semana pasada en más de una ocasión para tratar de disipar los temores por el manto que cubría el cielo pequinés, que según reiteró era básicamente niebla y no polución.

Du atribuyó el sol de estos dos días a medidas como la retirada de más de un millón de vehículos de las calles, en un cambio tan radical que ha dejado boquiabiertos a los deportistas concentrados en Pekín, como el clavadista colombiano Juan Urán.

Pero el sol nunca dura en Pekín.

En una rueda de prensa hoy, la subdirectora del Buró Meteorológico de Pekín, Wang Jianjie, afirmó que, para el próximo 8 de agosto, cuando se inauguren los JJOO, se prevé que el tiempo esté nublado y "veremos algunos chubascos y truenos", aunque vaticinó que no serán muy persistentes.

Tuvo, no obstante, palabras tranquilizadoras: "Incluso si llueve durante la ceremonia de inauguración, la actual tecnología puede garantizar que el efecto de los fuegos artificiales no se vea afectado", publicó la agencia oficial Xinhua.

Parte de esos fuegos, anunciados como uno de los platos fuertes de la ceremonia, se pudieron ver ayer desde toda la ciudad durante un ensayo general de la inauguración, que sigue guardada no obstante bajo cuidadoso celo.

Las autoridades meteorológicas de Pekín habían cifrado previamente en un 47 por ciento las posibilidades de precipitaciones ese día, aunque sólo en un 21 por ciento de que lo haga precisamente sobre el Estadio Olímpico, donde tendrá lugar la ceremonia.

Los científicos están preparados para hacer uso de una modificación artificial del tiempo si es necesario, con los ya célebres cañonazos de yoduro de plata, aunque el método no es ni mucho menos infalible y decidirán si aplicarlo en función de las condiciones meteorológicas y el tipo de nubes.