Calor y ozono en la 'Ciudad del Rock'

Madrid.-  Un sol de justicia, más de 35 grados de temperatura, pocas zonas de sombra y niveles altos de ozono troposférico, un gas nocivo para la salud.

Estas fueron las condiciones atmosféricas que acompañaron el sábado por la tarde a las 45.000 personas que, según los organizadores, acudieron a la 'Ciudad del Rock', construida en Arganda del Rey para acoger el festival Rock in Rio, en el segundo de los cinco días de conciertos.

A las siete de la tarde del sábado, cuatro de las 23 estaciones operativas de la red de medición autonómica superaron el denominado umbral de información a la población (180 microgramos de ozono (metro cúbico de aire de media en una hora) y la de Arganda fue la que registró una media más alta (194 microgramos).

Cuando se alcanza este umbral la Administración regional, según la normativa, tiene la obligación de avisar para que la población (sobre todo los sectores de riesgo: niños, ancianos, personas alérgicas y con problemas respiratorios) tome precauciones para proteger la salud.

La Comunidad de Madrid, como hace siempre que se alcanza el umbral de información, avisó a través de su 'web' y de mensajes 'sms', así como a los consistorios afectados, entre ellos el de Arganda, por correo electrónico o fax, y a los medios de comunicación.

El protocolo establece que corresponde a los ayuntamientos, como administración más cercana a los ciudadanos, el deber de informar a la población.

En el Consistorio argandeño nadie quiso explicar hoy a Efe qué hizo para avisar a los ciudadanos y si se puso en contacto con los organizadores de Rock in Rio para comunicar la polución por ozono.

Los organizadores del festival no recibieron ninguna llamada del Ayuntamiento ni de la Policía Local para advertir de la superación, ha confirmado a Efe la vicepresidenta de Rock in Rio, Roberta Medina.

Ésta señaló que pedirá a las autoridades municipales que comuniquen a los responsables del festival si se repiten durante el fin de semana los niveles de hace siete días.

En declaraciones a Efe, el portavoz de Ecologistas en Acción Juan García Vicente criticó al Ayuntamiento de Arganda "por no cumplir con su obligación de alertar a la población, cuando además acogía un evento al aire libre que reunió a varias decenas de miles de personas".

García también arremetió contra la Comunidad de Madrid por su "fracaso" a la hora de prever estas superaciones (una decena en siete estaciones desde que se inició el verano) y denunció el "tremendo esfuerzo" que hace la Administración regional por "empeorar" la situación, promoviendo más carreteras y con ellas más tráfico y contaminación.

"La dinámica del ozono es conocida", resume el portavoz ecologista, "el tráfico produce emisiones de óxidos de nitrógeno, que por acción del calor y del sol reaccionan dando lugar a episodios de contaminación por ozono troposférico en zonas con menos cantidad de óxidos de nitrógeno, lo que explica que los niveles altos se den en lugares alejados de donde se genera".

Los efectos sobre la salud por altos niveles de ozono (O3) van desde la disminución de la capacidad respiratoria hasta la pérdida de vitalidad, alteraciones del sistema inmunológico, dolores de cabeza, irritación de ojos y problemas cardíacos.

El sábado pasado, el dispositivo sanitario de Rock in Rio, formado por miembros del Servicio de Urgencia Médica de Madrid (Summa), Cruz Roja y Protección Civil, atendió a 22 personas por mareos y síncopes y a 13 por cefaleas, mientras que la víspera, con más asistentes, sólo 3 personas sufrieron cefaleas y 2 mareos, según datos facilitados a Efe por un portavoz del Summa.

El viernes acudieron a la 'Ciudad del Rock' un total de 51.000 personas, mientras que el sábado fueron 45.000, indicaron a Efe fuentes de la organización del festival.