Más trampas del recibo de la luz

Desde este mes de julio nuestro recibo pasará a ser mensual, en vez de bimestral, como era hasta ahora. ¿Razones? La picaresca económica y política tanto del Ministerio de Industria como de las compañías eléctricas, que congenian bien con Miguel Sebastián. Ahí van algunos de los motivos por los que pagaremos la luz que consumimos cada treinta días:

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• Adelantamos el dinero a las compañías eléctricas, lo cual no es moco de pavo. En la situación de los mercados, recibir unos cuantos millones frescos cada mes, en vez de cada dos meses es mucho más rentable. "Es una forma de pagar a las compañías la subida de las tarifas" reconoce un experto del sector, de los que han hablado del asunto con el ministro de Industria, Miguel Sebastián.
• Se diluye el efecto psicológico que la subida de la tarifa tiene sobre los consumidores. "Ah, pues la subida no es tanto" pensará más de un despistado sin darse cuenta de que antes al banco llegaba el recibo cada 60 días y ahora cada 30.

Pero el recibo mensual tiene otros problemas, que son antagónicos con lo que hasta ahora están prometiendo el presidente Zapatero y el mismo vicepresidente, Pedro Solbes. Mientras que ambos se han comprometido cada día a reducir hasta en un 30% las cargas burocáticas y administrativas que pesan sobre nuestras empresas, pasar el recibo de la luz de seis a 12 meses incrementa esas cargas, sin duda alguna. Además, entra en contradicción con la directiva europea que está ultimada ya sobre reducción de cargas administrativas empresariales.

Ahora bien, fuentes del sector eléctrico reconocen que les compensa ese aumento de burocracia a la hora de girar los recibos, con tal de recibir el dinero antes.

El aire acondicionado

Industria también está dando sorpresas entre sus colegas de otros ministerios. Eso es lo que pasó ayer mismo, cuando el departamento que dirige Miguel Sebastián salió alardeando de que este verano se estaba aplicando la normativa que limita el uso del aire acondicionado hasta los 24 grados. Los colegas del antiguo ministerio de Medio Ambiente -ahora integrado en Agricultura- no daban crédito a lo que veían. Es una normativa que ya aprobó el Consejo de Ministros el año pasado.

¿Tan confiados están los políticos en la falta de memoria de los periodistas y de los consumidores? Parece ser que sí.