El Ayuntamiento quiere cambiar el Plan General para facilitar el derribo de la infravivienda

Madrid.-  El Ayuntamiento de Madrid quiere modificar el Plan General, vigente desde 1997, para eliminar uno de los obstáculos que frena su política de rehabilitación: la obligación de reducir la edificabilidad de una parcela cuando se derriba un edificio, incluso aunque éste sea considerado infravivienda.

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(EFE)

El Ayuntamiento de Madrid quiere modificar el Plan General para eliminar uno de los obstáculos que frena su política de rehabilitación: la obligación de reducir la edificabilidad de una parcela cuando se derriba un edificio, incluso aunque éste sea considerado infravivienda.

La propuesta supondría, primero, definir el concepto de infravivienda y de edificio inadecuado para el uso residencial y, segundo, establecer que se mantendrá la edificabilidad "sólo en el caso de acometerse obras de reestructuración o de nueva construcción para eliminar infravivienda".

Esta es la modificación del Plan General -aprobado por la Comunidad siendo presidente el actual alcalde, Alberto Ruiz-Gallardón- que el Ayuntamiento ha planteado ya a la Administración regional, con la que quiere coordinar la reforma, y que hoy a vuelto a defender en la sexta reunión de la Mesa por la Rehabilitación.

Según ha manifestado al término de la misma la delegada de Urbanismo, Pilar Martínez, un propietario o comunidad de vecinos que quiera derribar un edificio que realmente no reúne las condiciones mínimas -ha puesto como ejemplo viviendas sin aseo o pisos de 17 metros cuadrados sin ventana- "no les salen las cuentas" porque la nueva construcción debe ser obligatoriamente más pequeña.

De esta forma, asegura, "los problemas se mantiene durante décadas" sin que nadie pueda hacer nada.

Desde que fue presentada la propuesta a la Comunidad ha habido dos reuniones con la Consejería de Medio Ambiente y Ordenación del Territorio que dirige Beatriz Elorriaga, pero el Ayuntamiento está todavía a la espera de una respuesta.

Martínez quiere una respuesta afirmativa o una alternativa viable, aunque ha indicado que la Consejería de Medio Ambiente y Ordenación del Territorio "se ha mostrado muy receptiva a la propuesta y se pronunciará en cualquier momento".

El Ayuntamiento de Madrid no tiene datos de cuántas infraviviendas existen en la ciudad precisamente porque no hay una definición legal de qué es infravivienda, aunque no duda de que son "miles".

En este sentido, el concejal socialista Pedro Sánchez, presente en la reunión de la Mesa, ha recordado que "siempre se ha dicho desde el Ayuntamiento que había que rehabilitar 40.000 viviendas".

Como Martínez, Sánchez ha defendido la necesidad de que la Comunidad de Madrid apruebe una ley de rehabilitación, aunque la delegada también considera necesaria una ley estatal, porque "en España la legislación no acompaña, no afronta estos problemas".

La sexta reunión de la Mesa por la Rehabilitación ha decidido también la creación de dos grupos de trabajo: uno para definir el modelo de intervención social y de participación ciudadana en el centro y otro para fijar un marco de colaboración con los agentes de la rehabilitación de cara a futuras actuaciones en manzanas completas.

El primer grupo de trabajo, que se encargará de definir un modelo de intervención basado en que las actuaciones que se llevarán a cabo en el centro no sólo deben contemplar los aspectos urbanísticos, sino que han de ir acompañados de un modelo social y de una amplia y permanente participación, será coordinado por el sociólogo y profesor universitario Luis Cortés.

El segundo grupo de trabajo, que estudiará los mecanismos de colaboración con el sector especializado en rehabilitación para facilitar la viabilidad de las futuras actuaciones en manzanas, en las que se considera necesario sumar los esfuerzos de todos los sectores, será dirigido por Juan José de Gracia, coordinador General de Vivienda del Ayuntamiento de Madrid, y José Manuel Galindo, presidente de ASPRIMA.