Díaz-Fierros aboga por adelantarse al cambio climático y aprovechar sus aspectos positivos

Santiago de Compostela.-  El catedrático de Edafología de la Universidad de Santiago Francisco Díaz-Fierros, reciente Premio Nacional de Pensamiento y Cultura Científica considera, en una entrevista a Efe en víspera del Día del medio Ambiente, que las futuras acciones sobre el cambio climático pasan por adelantarse y "aprovechar" sus posibles aspectos positivos en beneficio de los sectores económicos.

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(EFE)

El catedrático de Edafología de la Universidad de Santiago Francisco Díaz-Fierros aboga, en una entrevista con Efe, por adelantarse al cambio climático y aprovechar sus aspectos positivos.

Pregunta.- ¿Es tan importante que pequeños avances lleguen al gran público?

Respuesta. -Los medios tienen el vicio de escoger los aspectos más espectaculares de la ciencia, pero la ciencia es un proceso colectivo. La ciencia es una gran lección de humildad, no es como las Artes. "La Divina Comedia" no se podría haber escrito sin Dante, pero la relatividad se podría haber descubierto sin Einstein.

P.- ¿Galardones como el Premio Nacional ayudan a hacer más cercana la ciencia?

R.- Se está premiando la interrelación de la ciencia con otras ramas del saber y del pensamiento. No es una actividad aislada, es una actividad más de la cultura.

P.- ¿Su batalla importante es contra el cambio climático?

R.- Últimamente abordo la influencia del cambio climático y los efectos de los incendios forestales. Estudio los riesgos de inundaciones en Galicia tras los incendios y en qué medida los podemos predecir y tomar medidas preventivas. Quince días después de que termine la temporada de incendios podemos tener un mapa de riesgos de erosión, que definen cuáles son las zonas más inundables.

P.- ¿Puede el monte gallego soportar otro verano de incendios como el de 2006?

R.- El problema de los incendios en Galicia no es que haya un año muy malo, porque la capacidad de recuperación de la naturaleza gallega es muy alta y tendría capacidad para soportarlo de nuevo. El problema es la reincidencia, porque en Galicia hay puntos calientes en los que hay una incidencia excesiva de repetición de incendios, por lo que hay dificultad para recuperar la tierra.

P.- ¿Se denota una sensibilidad hacia el medioambiente en las políticas del Gobierno?

R.- La sensibilidad que está demostrando la Consellería de Medio Ambiente hacia en cambio climático está a la vista. Galicia es una de las comunidades en las que más se está trabajando sobre cambio climático, de hecho, es un referente y no sólo en España.

En ese terreno se están dando pasos como nunca se dieron, porque siempre anduvimos por detrás de otros. En este caso, creo que vamos por delante en muchos aspectos.

P.- ¿Falta alguna política concreta?

R.- La más difícil es la de sensibilización de la sociedad, que tiene una memoria muy frágil. Con los incendios, lo importante es mantener la tensión en la sociedad porque en Galicia son un problema de siempre que se puede agravar por el cambio climático. No va a desaparecer nunca.

P.- Del medioambiente, ¿hay algún aspecto que necesite más atención?

R.- Hay campos con muchas dificultades, como el de las pizarreras, que están en una zona tremendamente degradada. Ahí se está intentado hacer algo, pero los procesos son muy complicados porque hay intereses económicos y sociales serios. Hay que reorientar las actividades y empezar a hacer medidas serias de restauración. Desde el punto de vista del paisaje, otro aspecto que necesita más atención es la costa, que es un auténtico desastre.

P.- El cambio climático está provocando el adelanto de algunas cosechas...

R.- Se ve claramente cómo todas las cosechas tienen un adelanto de las fases fenológicas que está determinado por el cambio climático. La vid es una de las cosechas que nota más la influencia porque es muy dependiente de la temperatura. Hay adelantos de casi un mes en sus fases, pero esto tiene más connotaciones positivas que negativas. Positivas porque se pueden ampliar el número de variedades de vid, pero también hay problemas sobre especies adaptadas a climas más frescos, como el Albariño.

P.- Hay entonces consecuencias visibles del cambio climático, ¿qué debe hacer Galicia para adaptarse?

R.- Tiene que estudiar los problemas para conocer la dimensión del cambio. Se está trabajando para tener un modelo predictivo para Galicia y hay que conocer la repercusión sobre los sectores económicos para aprovechar los aspectos positivos. Hay que ir por delante del cambio climático para que, económicamente, pueda dar un buen resultado.

También hay que adaptarse a los aspectos negativos, hay especies que tendríamos que ir sustituyendo por otras. Estamos en la primera fase, pero en un año estaremos preparados ya para abordar las estrategias a seguir.

P.- ¿Tenemos que pensar en recuperar zonas degradadas o en frenar estos procesos?