Se multiplica el apoyo al campo argentino en el conflicto con el Gobierno

Buenos Aires.-  Comerciantes y pobladores de capitales provinciales y localidades de ricas zonas rurales de Argentina se sumaron hoy a la protesta de las asociaciones agrarias en el conflicto por las políticas del Gobierno.

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(EFE)

La huelga de los productores agropecuarios argentinos mantiene paralizadas las actividades del Mercado de Hacienda de Buenos Aires, el mayor del país.

Las protestas, que incluyen cierres parciales de los comercios, movilizaron a miles de pobladores, agricultores y ganaderos en momentos en que los dirigentes del campo resolverán hoy si siguen su huelga comercial, la tercera que realizan en los 82 días que llevan en conflicto.

La huelga mantiene paralizadas las actividades del Mercado de Hacienda de Buenos Aires, el mayor del país.

Dirigentes de las asociaciones agropecuarias en conflicto, que en conjunto reúnen a unos 290.000 productores de todo tipo, volvieron a culpar al Gobierno por la ruptura del diálogo y advirtieron sobre la creciente irritación que causa la presión impositiva y las regulaciones sobre el sector.

Sus portavoces aseguraron de que hay por lo menos 200 piquetes de huelguistas en otros tantos puntos de carreteras de las provincias de Buenos Aires, Santa Fe y Córdoba, las mayores productoras de alimentos del país.

Las manifestaciones más grandes paralizaron las actividades en las localidades de Armstrong y Reconquista, en Santa Fe, y en la ciudad de Gualeguaychú, en la provincia de Entre Ríos, en el noreste del país.

También hubo una multitudinaria marcha en la ciudad bonaerense de San Pedro, cuyo alcalde, Mario Barbieri, fue citado por la justicia por su presunto apoyo a los bloqueos de carreteras mientras que ocho productores agropecuarios estuvieron doce horas detenidos el viernes bajo el cargo de incendiar pastizales.

En la ciudad de Córdoba, capital de la provincia homónima del centro del país, 28 centros comerciales, industriales y de servicios resolvieron cerrar sus locales por dos horas, protesta que también siguieron comerciantes de la vecina Santa Fe.

"La gente que está en la ruta está dispuesta a seguir en la lucha. Lo que más molesta es escuchar decir que el campo se ha negado al diálogo", subrayó el presidente de la Sociedad Rural, Luciano Miguens, a la emisora Radio 10.

"Nos llama la atención que no haya ninguna señal en cuanto a juntarse en ese diálogo, donde los dos deben estar dispuestos a escuchar al otro", puntualizó.

Pedro Apaolaza, quien preside la Confederación de Asociaciones Rurales de Buenos Aires y La Pampa (Carbap), aseguró a su vez que los productores "están muy preocupados y con muchas ganas de protestar".

El dirigente coincidió con Miguens en que el Gobierno "nunca puso sobre la mesa" de negociaciones al sistema de impuestos móviles a las exportaciones de granos, el principal motivo de conflicto.

En tanto, activistas de agrupaciones sociales afines al Gobierno de Cristina Fernández de Kirchner se manifestaron en repudio a las protestas del campo ante la sede de la Sociedad Rural Argentina en el centro de Buenos Aires.

El Boletín Oficial del Estado publicó hoy una modificación al sistema de impuestos móviles que a diferencia del puesto en marcha el 11 de marzo pasado, cuando estalló el conflicto, pone límites a la fuerte presión del Fisco sobre el sector.

Las patronales agropecuarias rechazan el nuevo sistema porque aseguran que los topes a los impuestos comenzarán a regir cuando los precios internacionales de los cereales alcancen niveles que están lejos de los actuales.