El Consejo de Europa pide a los países garantizar normas mínimas de acogida

París.-  Una comisión de la Asamblea Parlamentaria del Consejo de Europa (PACE) llamó hoy a garantizar normas mínimas de acogida para inmigrantes ilegales, refugiados y demandantes de asilo llegados en pateras a las costas del sur de Europa, y a todos los países europeos a compartir la responsabilidad en esa acogida.

También instó a utilizar la retención administrativa de inmigrantes ilegales sólo cuando se necesita para impedir la entrada ilegal en el país o para asegurar la expulsión o extradición de los interesados, y a velar porque esa retención dure el menor tiempo posible y sea autorizada por las autoridades judiciales.

Estas y otras propuestas constan en un proyecto de resolución adoptado por la Comisión de Migraciones, Refugiados y Población de la PACE, que será debatido por el plenario de la Asamblea el próximo octubre, indicó el Consejo de Europa en un comunicado.

La comisión debatió hoy sobre un informe en el que se recuerda que la llegada masiva de inmigrantes en situación irregular, refugiados y demandantes de asilo a las costas del sur de Europa aumentó considerablemente en los últimos años.

Así, en 2006, más de 72.000 personas llegaron a España, Italia, Grecia y Malta, y, en 2007, el número superó las 51.000, indica el texto.

Denuncia que aumentan los casos en los que capitanes de barcos no hacen caso de las llamadas de socorro de pateras en dificultad y evoca alegaciones según las cuales las autoridades de Grecia y Malta supuestamente ignoraron esas llamadas o impidieron que se acercaran a sus aguas o costas esas pateras en peligro.

FRONTEX, la agencia de gestión de las fronteras de la Unión Europea tiene "un papel importante que jugar", como ofrecer asistencia para operaciones de búsqueda y rescate, señala el texto.

Se invita a todos los países del Consejo de Europa a aportar su apoyo a los países mediterráneos que afrontan flujos de inmigrantes ilegales, refugiados y demandantes de asilo.

En particular se les alienta a ofrecer asistencia en materia de búsqueda y salvamento marítimo, de acogida, de identificación de los países de origen, de organización del retorno y de la reubicación de las personas que necesiten una protección internacional.

Sobre las condiciones de detención, se afirma la necesidad de encarar problemas como "los períodos excesivos" de retención, el mal estado de las instalaciones, con hacinamiento y equipos sanitarios deficientes, la "falta de contacto" de los internados con el mundo exterior y la asistencia jurídica "inadecuada".

Es preciso revisar en particular la situación en los centros de retención en Malta y Grecia, indica el texto, que evoca también informaciones "preocupantes" en España sobre el trato de menores no acompañados.