El Govern obligará a los centros a reservar plazas para alumnos con necesidades

Palma.-  La Conselleria de Educación obligará a los centros escolares mantenidos con fondos públicos a reservar en todos los grupos y niveles tres plazas para alumnos con necesidades específicas de apoyo educativo hasta mediados de septiembre, para favorecer una distribución más equilibrada de este alumnado.

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(EFE)

La consellera de Educación, Bárbara Galmes.

La medida es una de las principales novedades del decreto de admisión de alumnos en centros públicos y concertados para el curso 2008-09, que este viernes será elevado al Consell de Govern para su aprobación definitiva, según ha anunciado hoy en rueda de prensa la consellera de Educación, Bárbara Galmés.

El principio que ha guiado la redacción del decreto es, según Galmés, "garantizar la igualdad de oportunidades y la equidad" en el proceso de escolarización de los alumnos de Baleares.

La consellera ha resumido los objetivos de la nueva norma en garantizar las necesidades de escolarización en condiciones de igualdad, asegurar el derecho a la libre elección de centro, llevar a cabo una distribución más equilibrada del alumnado con necesidades específicas educativas y dar mayor transparencia al proceso de escolarización.

El decreto establece que los centros deberán reservar tres plazas de cada grupo y nivel -de las 25 que constituyen el ratio de Educación Infantil o las 30 de Secundaria- para los alumnos con necesidades específicas hasta que acabe la preinscripción y matrícula.

Dichas plazas tendrán "su propio sistema de baremación" para ser concedidas, según ha explicado el director general de Planificación y Centros, Miquel Martorell, quien ha añadido que dicha reserva ya existía, pero hasta el momento se daba "libertad a los centros que tenían cubiertas sus solicitudes para aumentar plazas, de forma que posteriormente era difícil distribuir a estos alumnos".

Martorell ha detallado que se consideran alumnos con necesidades específicas de apoyo educativo aquellos que presentan "necesidades educativas especiales por problemas psicomotrices o distintos tipos de retraso en el aprendizaje".

También están incluidos los alumnos con altas capacidades intelectuales, integración tardía al sistema educativo o recién llegados y alumnos de compensación educativa.

Según ha indicado Martorell, en la actualidad la distribución del alumnado de compensatoria y recién llegado de alumnos está descompensada y se sitúa "en un 20 por ciento en centros concertados y un 80 por ciento en centros públicos". El reparto de alumnos con necesidades educativas especiales es "más o menos equilibrado".

Otra novedad que introduce el decreto es que la Conselleria velará porque el número de alumnos con necesidades no exceda el 10 por ciento del alumnado de este tipo de su zona de escolarización, ni el 30 por ciento del total de estudiantes del centro.

Para hacerlo posible, la Consellería podrá modificar la oferta de plazas y "reducir hasta un 20 por ciento el número de alumnos por unidad escolar" así como dotar al centro del personal necesario para atender a estos alumnos con necesidades.

Acabado el proceso de admisión, los alumnos que lleguen después serán repartidos entre los centros próximos al lugar de residencia del estudiante, por decisión de las Comisiones de Escolarización, que empezarán a funcionar entre los días 9 y 13 de junio.

En cuanto a los criterios de baremación para valorar las solicitudes, se mantiene la proximidad del centro escolar al domicilio del alumno o al lugar de trabajo de los padres, pero se introduce la concesión de puntos en función de la antigüedad, de forma que "el tiempo mínimo para recibir puntos serán dos meses de residencia acreditada" y no recibirá la misma puntuación quien lleve "tres meses que siete".

El criterio complementario de la concurrencia de una enfermedad crónica en el alumno se ha detallado en el decreto, que incluye "un listado exhaustivo de patologías" para evitar el fraude.

También se ha eliminado la puntuación que hasta ahora podían conceder los centros escolares por padres que fueran ex alumnos.

La Conselleria prevé que el próximo curso haya 144.500 alumnos matriculados en Baleares en Educación Infantil, Primaria, Secundaria, Bachillerato, Cualificación Profesional Inicial y Educación Especial; aunque el nuevo decreto se aplicará únicamente a los niños que se incorporen al sistema educativo y a quienes cambien de centro, un colectivo que se estima en 15.000 estudiantes.

El decreto no se aplica a los alumnos que ya matriculados dado que su plaza está garantizada hasta la finalización de la enseñanza obligatoria o del Bachillerato.

El plazo de admisión empieza con la adscripción de los alumnos que al cambiar de ciclo deben cambiar de centro -de Infantil a Primaria, o de ESO a Bachiller- el 14 de abril.