El Gobierno brasileño lanzará un plan para el desarrollo sostenible de la Amazonia

Río de Janeiro.-  El Gobierno brasileño lanzará un ambicioso plan para impulsar el desarrollo sostenible de la Amazonia, tras los recientes conflictos con madereras por los alarmantes datos sobre deforestación, informaron hoy fuentes oficiales.

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(EFE)

"La idea de mantener la Amazonia como un santuario no puede funcionar, porque no solo es una colección de árboles, sino un conjunto de personas que, si no tienen condiciones económicas, desforestarán", argumentó el secretario de planificación estratégica a largo plazo de la Presidencia, Roberto Mangabeira Unger (d), quien aquí saluda al presidente brasileño, Luiz Inácio Lula da Silva.

El plan se lanzará previsiblemente el próximo 25 de marzo y buscará poner fin a la deforestación desordenada a la vez que impulsa la ocupación y el desarrollo de la región, según explicó hoy el secretario de planificación estratégica a largo plazo de la Presidencia, Roberto Mangabeira Unger, en un desayuno de prensa.

"La idea de mantener la Amazonia como un santuario no puede funcionar, porque no solo es una colección de árboles, sino un conjunto de personas que, si no tienen condiciones económicas, desforestarán", argumentó Unger.

El nuevo proyecto trazará las directrices que tratarán de frenar las amenazas al mayor bosque tropical del planeta y sentar las bases para su desarrollo económico y social.

El plan tendrá la colaboración del ministerio de Medio Ambiente, el de Integración Nacional, los nueve gobiernos regionales, y estará coordinado por la secretaría que dirige Unger.

La primera cuestión que abordará, según el secretario, será la regulación de la propiedad de la tierra, que durante décadas se ha ocupado de forma ilegal a golpe de la falsificación sistemática de documentos de propiedad.

Según un reciente estudio, casi la tercera parte de los 200.000 kilómetros cuadrados de esta selva tropical está de forma irregular en manos de propietarios privados.

La segunda vertiente del plan abordará el ordenamiento económico y ecológico, tanto en regiones arboladas como en las de sabana y en las ya desforestadas.

En éstas, el Gobierno fomentará la ganadería intensiva y métodos de agricultura moderna, menos agresivas para el entorno.

En las regiones de selva cerrada se perseguirá que el "bosque en pie" tenga "más valor que el derribado" para los pequeños productores.

Un punto clave será la creación de industrias que generen riqueza a partir del bosque, lo que englobaría tanto la explotación de productos forestales como el desarrollo de tecnologías diseñadas para el bosque tropical.

Estas tecnologías, según Unger, "no existen en el mercado", puesto que los países desarrollados producen sólo maquinaria adaptada al bosque templado.

Para el secretario, la Amazonia puede servir como un "laboratorio nacional" de vanguardia, que pueda servir para que Brasil repiense su modelo económico.

Hace tan solo dos semanas, la policía inició una operación de grandes dimensiones, que implicó la movilización de un millar de agentes, para frenar la tala y el comercio ilegal de maderas nobles.

Esta acción de choque fue la reacción a los últimos y alarmantes datos sobre deforestación que supusieron un "aumento nunca visto" de la tala ilegal, en palabras del ministerio de Medio Ambiente.