Gracias a ti, Moreno

(EFE)

Moreno muestra, de fondo, imágenes de sus lesiones.

La mansión de Moreno es una puerta abierta a un mundo de cuento. Y no porque a la entrada, inexplicablemente, haya aparcada una moto acuática. Tampoco porque a modo de decoración navideña te reciba un ciervo luminoso y autómata que gira la cabeza. O por el dálmata de porcelana y el enano de jardín que rodean la piscina. NO. La mansión de Moreno es una puerta abierta a un mundo de cuento porque en su interior te espera un personaje de cuento.

José Luis Moreno ha comparecido ante los medios en plena escena del crimen. Una marabunta de periodistas pugnaba por hallar un hueco donde hincar la cámara. Para ello, había que apartar, como si tal cosa, un facsímil de 'La vida breve', aquella ópera en dos actos a la que puso música Manuel de Falla. Otros periodistas apoyaban sus libretas en un piano de cola.

Embutido en un jersey como de Power Ranger, Moreno ha desgastado todos los agradecimientos posibles durante su discurso: "El derroche de cariño y respeto ha sido un ejemplo que ha llegado más allá de nuestras fronteras" (¿acaso nos perdimos un especial sobre Moreno en la BBC?); "habéis sido la medicina que me ha aupado"; "es como volver a nacer, pero que además te aplaudan al nacer", etcétera. Todo ello se ha producido, lo juro, mientras un televisor mostraba de fondo un carrusel de fotos con las lesiones de Moreno. Un ojo rojo por aquí. Un muslamen que insinuaba una nalga amoratada...

A veces cálido y a veces siniestro, en todo caso se percibe que el productor es un personaje poderoso. Aunque su poder bascula entre el doctor Maligno de Austin Powers y el autorretrato que el propio Moreno se regaló en la segunda entrega de Torrente. También se refirió a la investigación policial. El ex ventrílocuo asegura que sus asaltantes poseían información concreta de la casa. También que existen imágenes de los coches que emplearon. De las diez personas que trabajan en el servicio y mantenimiento de la casa, cuatro son jardineros, por lo que no estaban en la casa en el momento de los hechos. Los agentes pueden seguir jugando al Cluedo.

Por lo demás, Moreno ha aprendido una gran lección después del suceso: "Al notar lo fácil que te puedes ir me voy a agarrar a esto como una fiera". Quizá sea esto lo más importante que nos ha enseñando un hombre que aspiraba a construir un templo de belleza helénica y tuvo que conformarse con la reconstrucción, sobre un plató, de un mundo mágico de bailarinas con lentejuelas y humoristas de verbena de pueblo.

¿Crees que los medios han tratado bien y han apoyado a Moreno en todo momento? ¿O crees que los medios se han limitado a rellenar espacio con especulaciones sobre uno de los temas más jugosos para la prensa rosa en los últimos meses?