La antigua ciudad romana de Acci sale a escena

El arqueólogo Antonio López descubre los restos de lo que pudo ser el antiguo teatro romano de la ciudad

Todas las tardes la muralla de la antigua ciudad árabe de Wadi-as (Guadix) se proyecta sobre la tierra arcillosa de la llamada Huerta de los Lao. La tierra guarda silencios sobre sus secretos. Pero 2.000 años de silencio son muchos. Sobre ese terreno se han cultivado hortalizas, se ha jugado con la bicicleta o, incluso, se han montado ferias.

La tierra siempre estuvo muda. Los hombres del siglo XXI quieren construir un aparcamiento subterráneo y el tesoro sale a la luz. Cuarenta metros de largo y ocho de profundidad son las dimensiones de un muro del siglo I y enterrado desde el siglo IV. El arqueólogo y jefe de la excavación, Antonio López, asegura que se trata de un gran edificio público de la ciudad romana, Acci, pero no asegura que sea un teatro. El arqueólogo no quiere echar las campañas al vuelo, pero todos los datos muestran esa hipótesis como muy acertada.

Cruzamos los dedos y comenzamos a mirar datos que nos hablen sobre lo recién descubierto. Es un muro de 43 metros de largo. Son dimensiones parecidas a las de otros teatros romanos de Hispania, por ejemplo, el de Segobriga. Los cimientos tienen una profundidad de unos ocho metros; la estructura está preparada para soportar una construcción de entre seis y ocho metros de altura. Seguimos buscando los datos que confirmen el hallazgo.

Por otro lado, el muro está enfrentado a la muralla, precisamente en la parte en la que este hace una curva hacia el interior, una media luna, la misma forma semicircular de las gradas de un teatro romano. La cavea -que así se llamaba la grada- se pudo apoyar sobre la parte exterior de la muralla romana, por tanto el edificio descubierto estaba a las afueras de la ciudad como era habitual en este tipo de edificios. Otra pista más de nuestro teatro.

Sin embargo, para el arqueólogo todo son indicios y nada es una prueba definitiva ¿Qué sería necesario encontrar para saber que realmente es un teatro? Encontrar la cavea, es decir, la grada. De momento sólo tenemos el muro que pudo ser la base del proscaenium (escenario). También se han encontrado fustes de columnas sobre lo que se sospecha que sería la orchestra y restos cerámicos del siglo I y del siglo IV.

La esperada cavea debe de estar justo donde termina la cata arqueológica. Habrá que esperar. Aunque por la importancia de lo encontrado hasta el momento todo indica .

Pero ¿cómo desapareció un edificio de estas características? ¿cómo se lo comió la tierra? La cerámica del siglo IV encontrada nos da luz sobre sus últimos años, según Antonio López. En esta época el imperio se ruraliza, el sostenimiento de un gran edificio se vuelve insoportable para las arcas públicas de un municipio cada vez más mermado y el edificio cae en desuso. Primero son las malas hiervas las que sustituyen a los espectadores, después los vecinos encuentran en el lugar una estupenda cantera, después caen las columnas y la tierra termina el proceso. Después vendrá la muralla árabe que oculta toda evidencia con nuevas piedras y nueva argamasa.

¿Y el aparcamiento? de momento a esperar, pero lo que sí es cierto es que ha hecho un buen servicio antes de nacer.