Triste cumpleaños

El Real Madrid llega a los 106 años de vida en el peor momento de la temporada. La dinámica perdedora del mes de febrero, se mantiene en Marzo tras caer derrotado en el Bernabeu ante la Roma ( 7 ª derrota en 14 partidos jugados en 2008)y quedarse fuera de la Champions League en octavos de final por cuarto año consecutivo.

Foto: Eurosport.com

NoHace tres meses, el Real Madrid marcaba su techo de temporada, derrotando al FC Barcelona en el Nou Camp en la víspera de Navidad. La liga parecía decidida, y el equipo daba una exhibición de juego, demostrando un poderío físico incontestable.

Ramón Calderón, el presidente del club de Concha Espina, sacaba pecho, anunciando que el equipo estaba capacitado para ganar las tres competiciones, Liga , Copa y Champions. El abogado, famoso por sus salidas de tonos y múltiples bravuconadas, se mostraba satisfecho por el esfuerzo de más de 100 millones de Euros invertido en fichajes. El defensa portugués Pepe y el extremo zurdo holandés Robben habían costado 66 millones de eurosy excepto la exhibición del central ante el Barça, no habían jugado con continuidad y, por tanto, no habían demostrado nada.

El equipo, que rompía todas las marcas en cuanto a puntos obtenidos, se había aliado con la suerte en muchos de los partidos jugados ante equipos modestos, pero había dado la cara en los principales campos de España.

Así, se llegó al mes de Enero y el equipo pudo mantener la racha. Las continuas lesiones musculares empezaban a pasar factura a una plantilla en la que reinaba el buen ambiente. Se llegó al cruce contra el Mallorca, en la Copa. El equipo perdió el partido en la isla y los de Gregorio Manzano rompieron la imbatibilidad blanca en el Bernabeu en un partido en el que el Madrid falló ocasiones de gol hasta el aburrimiento. Sin Casillas y Van Nistelrooy, que no iniciaron ninguno de los dos partidos para descansar, el equipo daba los primeros síntomas de no ser la super-plantilla que se anunciaba desde el club merengue. Jugadores como Saviola, Soldado o Higuiaín eran incapaces de producir en ataque, y el equipo se resentía cada vez que Raúl y pichichi holandés se tomaban un respiro.

Con el Barça en un mal momento, con bajas por lesión y sin Eto´o y Toure, que disputaban la Copa África, el Madrid daba por buena su eliminación copera si con éllo aumentaba su ventaja en la liga (hasta 9 puntos) y estaba fresco en la Champions. La Roma esperaba a la vuelta de la esquina, y el equipo empezaba pretendía administrar su ventaja.

Se llegó a febrero con el primer partido ante un modesto, el Almería. El equipo se mostraba excesivamente relajado y estuvo ausente en el Estadio de los Juegos del Mediterráneo, perdiendo con claridad, 2-0. Schuster, que ya había demostrado que la diplomacia no es lo suyo, trataba de justificar lo injustificable, distrayendo la atención ante los primeros síntomas de que el equipo no funcionaba.

Tras los almerienses, el Madrid se dió un festín goleador ante el Valladolid (7-0), pero fue un espejismo. La segunda salida consecutiva a Andalucía, esta vez a Sevilla para jugar ante el Betis, fue un desastre. El equipo se puso por delante y por momento dominó con claridad el partido, pero los locales le dieron la vuelta y derrotaron al campeón.  El 2-1 final no fue la peor noticia. El equipo potente del Nou Camp se había diluído, dando paso malas sensaciones por el bajón que equipo experimentaba en las segundas partes.

Se llegó al partido de Champions en un pésimo momento de juego y con la prensa buscando las cosquillas a Schuster. El alemán demostraba por momento ser un verdadero genio , atrayendo todas las críticas hacia él mismo y su falta de tacto en sus declaraciones, dejando a los jugadores y sus continuas lesiones en un segundo plano.

La Roma, un equipo apartado del típico catenaccio italiano, era un buen rival, pero no parecía que fuera a crear problemas a los blancos. Durante media hora, el Madrid fue el dueño del Estadio Olímpico, con Raúl adelantando al Madrid en el marcador y continuos desbordes de Robben. Ocasiones, dinamismos, todo parecía controlado, pero la Roma reacciono y le dió al vuelta al partido. El 2-1 final dejaba todo abierto para el partido de vuelta y como diría el fallecido Juanito , "90 minuti en el Bernabeu son molto longos".

Tras la Roma, el Getafe se convertiría en una pesadilla para los de Schuster. Los azulones, que habían podido golear en el partido jugado en el Coliseo Alfonso Pérez, se tomaron su particular revancha, derrotando al equipo merengue con un gol tan absurdo como ilustrativo. 8 jugadores celebrando un gol anulado, Belenguer, el capitán getafense saca rápido el balón y contra 4 contra uno de los de Laudrup, que marcan ante Iker. 0-1. Y el Barça a dos puntos. Primeras críticas a la preparación física, apartado que lleva en exclusiva el italiano Walter Di Salvo, y sensación general de que los equipos de Schuster salen como motos y acaban la temporada arrastrándose.

El fin de semana pasado, el Madrid tenía un match-ball, su primera final. Visitaba Huelva y al decano del fútbol español, el Recreativo. A la misma hora, el Barça, que estaba a dos puntos, visitaba a un Atlético de Madrid que el año pasado se había llevado 6. Durante 5 minutos, el Madrid perdía el liderato, ya que caía 1-0 a la vez que Ronaldinho adelantaba a los culés en el Manzanares.

Como ya ocurrió el año pasado, el Madrid, con todo perdido, consiguió remontar, aliándose de nuevo con la fortuna. De perder el liderato, a aumentar la ventaja a 5 puntos, tras la sorprendente (y justa) derrota blaugrana en Madrid.

Se llegaba a una nueva final , a un partido clave para el equipo madridista, que debía remontar la eliminatoria para seguir en su competición favorita. Como siempre desde que es presidente, Calderón volvió a salirse del tiesto, sacando pecho de su nueva ventaja en la liga, y augurando un nuevo título en la Copa de Europa.

Y llegó la Roma, y el Madrid, con los tres holandeses (Robben, Snejder, Van Nistelrooy) fuera por lesión ,con Sergio Ramos sancionado y con  Pepe y Robihno, fuera de forma tras volver de sus lesiones, por supuesto, musculares, no pudo pasar la eliminatoria. Schuster, cuya estúpida polémica al dejar plantada a la prensa en Huelva había llenado todo los periódicos, fue superado por el técnico romano, Spalleti, que le dió en baño táctico en los dos partidos. Sin especular, esperando a su rival, los jugadores romanistas supieron controlar a los jugadores clave del Madrid, y aprovecharon sus ocasiones. El 1-2 final fue corto para los méritos de un equipo que nadie esperaba que dejara a los blancos en el camino.

Así, tras 100 millones de euros de inversión (130 si contamos desde Diciembre de 2006)  el equipo está en una situación parecida al pasado año. Una buena plantilla para la Liga, el Madrid ha demostrado que no puede con nadie en una eliminatoria a dos partidos. Tanto Betis y Bayern Munich, el año pasado, como Mallorca y Roma, éste, han sido justos vencedores .  La única diferencia es que ahora los blancos son líderes de la liga, y no vienen desde atrás, como ocurrió con la remontado de la temporada pasada. A diferencia de entonces, el equipo parece muerto físicamente, y quizás el exceso de carga de trabajo físico en el inicio sea un lastre para el tramo final de la liga.

Muchas dudas quedan por despejar, La principal es qué pasará con Schuster, cuya actitud ante los medios le ha puesto en el disparadero de todas las críticas y que ahora, ante un nuevo fracaso, no podrá más que repetir el título de liga que ya ganó su antecesor,
Fabio Capello. Si el italiano, cuyo carácter seco y uraño nunca le impidió atender con correción a todos los medios, fue despedido tras ganar la liga, quién puede apostar a favor de que Schuster sea el entrenador blanco la próxima temporada. Desde luego, las declaraciones del alemán en la rueda de prensa posterior al partido de anoche no le van a ayudar. Cuando en un momento tan delicado, el alemán afirmó "no sentirse responsable del fracaso de esta temporada", incitando a los medios a "preguntar a otros" para pedir responsabilidades (en clara referencia a Mijatovic y Calderón , a los que en numerosas ocasiones ha acusado de no ficharle los jugadores que él necesitaba), el alemán estaba abriendo una crisis interna que puede llevar al equipo a perder la liga. Los continuos rumores de llegadas y salidas de jugadores para la próxima temporada que a partir de la derrota de ayer llenaran las portadas de los diferentes medios de comunicación, pueden ser el detonante para que el equipo, definitivamente, se descomponga. Un pésimo regalo para celebrar el 106º aniversario  del mejor club del siglo XX.